La salud mental y la dieta vegana
Modulación Neurotransmisora
La inclusión de alimentos ricos en triptófano, como lentejas y garbanzos, en la dieta vegana contribuye a la síntesis de serotonina en el núcleo dorsal del rafe, mejorando así la regulación del estado de ánimo.
Vitamina B12 y Corteza Frontal
Alimentos enriquecidos con vitamina B12, como cereales fortificados y levadura nutricional, son fundamentales para preservar la función de la corteza frontal, esencial para decisiones ejecutivas y cognitivas.
Omega-3 Vegetal y Hipocampo
Fuentes veganas de omega-3, incluyendo semillas de chía y nueces, fortalecen la plasticidad sináptica en el hipocampo, mejorando la memoria y protegiendo contra trastornos cognitivos asociados al envejecimiento.
Ética y Estriado Ventral
La toma de decisiones éticas vinculada al veganismo activa el estriado ventral. Alimentos como espinacas y brócoli, ricos en folato, potencian este proceso, contribuyendo a la sensación de recompensa y satisfacción.
Propósito y Prefrontal Medial
Alimentos que impulsan la activación del prefrontal medial, como aguacates y frutos rojos ricos en antioxidantes, sustentan la conexión entre la conciencia ambiental y la construcción de un sentido de propósito.
Reducción de Factores de Riesgo y Corteza Cingulada
Una dieta vegana, al reducir factores de riesgo, influye positivamente en la corteza cingulada. Alimentos ricos en fibra, como la quinoa y las legumbres, respaldan esta relación, contribuyendo a la regulación emocional.
Reducción de Inflamación y Sistema Nervioso Central
Alimentos antiinflamatorios presentes en la dieta vegana, como cúrcuma y jengibre, protegen el sistema nervioso central, reduciendo la inflamación sistémica y previniendo trastornos neuropsiquiátricos.
Complejidad Antioxidante y Corteza Prefrontal Lateral
La corteza prefrontal lateral se beneficia de alimentos con complejidad antioxidante, como bayas y frutas cítricas, preservando funciones ejecutivas superiores y protegiendo contra el estrés oxidativo cerebral.
Microbiota Intestinal y Eje Intestino-Cerebro
Alimentos fermentados, como el chucrut y el kimchi, promueven la diversidad de la microbiota intestinal, fortaleciendo el eje intestino-cerebro y regulando la ansiedad y la depresión.
Planificación Nutricional y Cortex Parietal
La planificación nutricional consciente, con inclusión de alimentos ricos en hierro como espinacas y almendras, apoya el cortex parietal, esencial para la integración sensorial y cognición espacial, maximizando así los beneficios para la salud mental.